TRABAJO COMUNITARIO

El pasado sábado 12 de diciembre se realizó el trabajo comunitario planificado en el Qori Cancha. El mismo contó con la participación de varios miembros de la institución a los que hay que hacer extensivas nuestras felicitaciones y nuestro agradecimiento como admiración, por el esfuerzo realizado desde tempranas horas de la mañana hasta promediar las Hrs. 18:00 del día aproximadamente.
No se culminó la obra, pero se avanzó significativamente en su construcción, sentando bases para su desarrollo.
Habrá que decir también que no todos quienes se comprometieron y menos todos los que se dicen de Sartañani participaron de la actividad, lo que denota una falta de discernimiento y comprensión sobre la naturaleza de la institución, pues a menudo se entiende por ella sólo la participación en "eventos" de tipo musicales.
Con todo, hay que señalar que la actividad ha tenido, con sus pormenores en la desorganización y contratiempos infaltables en la puntualidad, resultados positivos, pues se ha avanzado de forma incuestionable en la afirmación del Qori Cancha, como centro ritual andino originario.
Hay que señalar también que la actividad, ha pretendido consolidar, en meritorio homenaje a nuestra guía espiritual de siempre, Mama Matilde, quien descubrió el lugar ha ya vasto tiempo.
Nuestro reconocimiento y agradecimiento a Mama Matilde.
¡Jallalla Sartañani!!!


























COMUNICADO

El Consejo de Autoridades informa a todos los miembros de la institución que, de conformidad a la resolución de Asamblea de 5 de diciembre pasado, se procederá a realizar la construcción de la Chakana en el Qori Cancha en base a la siguiente organización:

1. Todos los miembros deberán depositar en la sede institucional (Sotomayor Nro. 125, Vásquez y La Paz) hasta las 12:00 p.m. del día viernes 11 de diciembre: una bolsa de Arena (de Bs. 3 o 4 o 5) y un bidón de 5 litros con agua.

2. Deberán hacerse presentes en la Zanja de Coronación, a la altura de la cancha por donde subimos al Qori Cancha, a las 08:00 a.m. del día sábado 12 de diciembre para ayudar a subir los materiales e instrumentos de construcción y comenzar el trabajo, máximo, a las 09:00 a.m.
3. Todos los miembros deberán prever un refrigerio y merienda, básico.
4. El incumplimiento en la entrega de los materiales, de la impuntualidad en la concentración y de la inasistencia al trabajo, será sancionado de acuerdo a lo resuelto en asamblea, por lo que, de conformidad a la misma, ningún miembro puede excusarse por “no conocer” la actividad. Las sanciones serán aplicadas a todos, sin excepción.

P´ la Asamblea del Centro Cultural
El Consejo de Autoridades

Nota.- Se les recomienda estar pendientes a cualquier información.

INVITACIÓN


La Comunidad de Investigación, con motivo de la conmemoración de los 25 años de nuestro Centro Cultural, invita a todos sus miembros y ex-miembros a participar de la elaboración de una revista de anécdotas institucionales que será publicada para nuestro aniversario. A este efecto se tomarán en cuenta todos los escritos que nos sean remitidos, con el sólo requisito de que contengan hechos reales y ocurridos en el desarrollo de las actividades de la institución, quedando la revisión ortográfica y semántica a cargo de la comunidad. Las anécdotas serán publicadas con el nombre de sus autores y se gestionará un premio a la que guarde mejor composición.

La Comunidad de Investigación

“LAS OVEJAS DE ACHACACHI”

En su libro “El Dictador Suicida”, Augusto Céspedes ha consignado en su calidad de actor y observador de los días aquellos de lucha contra el régimen de Bautista Saavedra:

La línea de combate contra la “tiranía” se extendió desde la prensa, las aulas estudiantiles y las mansiones de la alta sociedad, hasta las casas de tolerancia, donde se atrincheró la juventud dorada del liberalismo, ahuyentada de las calles por los cholos. Esta juventud peleaba con denuedo, ignorando que su empecinamiento combativo no trascendía a las decisiones del liberal Patiño que, desde París, seguía controlando la parte financiera del nuevo régimen...
Los exponentes de la clase mestiza, hasta entonces subestimados, recibieron en cambio la autoridad que les confirió el caudillo. Recabó en pago su fidelidad, empleándolos en una labor de frenamiento físico de los opositores. “Saavedra gobernó el país a patadas”, diría posteriormente Salamanca a quien aquél hizo ofrecer un recibimiento a tiros en Oruro. El caudillo de la plebe consideraba seguramente cuán peligroso podía ser el crecimiento de las demostraciones callejeras, de aquél tipo “democrático” que estimulaba la “gente bien” y que atraen de pronto a la masa. Por eso las impedía mediante la organización de las “ovejas de Achacachi”, nombre de batalla que surgió cuando la prensa opositora descubrió la clave que se cruzaba entre el prefecto de La Paz y el subprefecto de Achacachi, cada vez que preveía una demostración antisaavedrista. La clave decía: “Envíe 50 ovejas”. Se trataba de rebaños proverbialmente feroces. Desde una ventana del Palacio Legislativo contemplé el modo con que tales ovejas arremetieron contra la primera manifestación liberal, dispersándola a puño limpio y a ladrillazos. En otra oportunidad, en la plaza Venezuela, me tocó, con otros estudiantes, ser perseguido a golpes por una turba de ovejas enardecidas que se presentaron a disolver una manifestación de universitarios contra Saavedra.

Éstos, son párrafos que ilustran, más allá de su contenido anecdótico, una fórmula de profundo contenido político: la utilización de las nacionalidades originarias, so pretexto de su incorporación a un “proceso de reestructuración” gubernamental (ahora se dice de cambio), para proseguir finalidades ajenas que en nada les beneficiaban. Pues, como el entonces universitario Céspedes mismo sostiene: “Nuestra sensibilidad recogía las vibraciones de la opinión de la clase culta y combatía a Saavedra por sus actos políticos. Nunca por sus medidas económicas, sobre cuya trascendencia gozábamos de una ignorancia clásicamente universitaria.” Ignorancia que acaso puede hacerse extensiva a otros sectores de la oposición como del mismo gobierno de entonces y que se develaba por el hecho de que, independientemente de los mandatarios circunstanciales del Palacio Quemado, los destinos del país se regían de acuerdo a los intereses de la rosca minera.

Dada la coyuntura actual, preelectoral, en la que se observa flamear la multicolor whipala, usar ponchos y chulus, incluso a candidatos de la derecha como Reyes Villa; lo menos que se puede exigir de quienes exigen nuestro respaldo a eso abstracto que llaman “proceso de cambio”, es que nos presenten un mínimo de razonamiento crítico sobre lo que con y en dicho proceso se viene logrando o se espera lograr en beneficio del país en general, y de las naciones originarias en particular; pues no a fuerza de repetir con más o menos locuacidad la publicidad de logros reales o imaginarios se han de transformar en realidad ilusiones por ella desmentidas, cuando la situación presente de las naciones originarias es que nada sustancial ha cambiado para ellas, con el mentado proceso de cambio del que se supone son adalides y beneficiarios.

Corresponde pues esclarecer críticamente estas nociones para verificar que acaso el contenido político de la anécdota que transcribimos no se venga repitiendo hoy y los pueblos indígenas, una vez más, incorporen su participación en la historia nacional como “ovejas”. A este esclarecimiento están llamados a coadyuvar quienes se sientan comprometidos con la lucha de las naciones originarias.

Arnold Campos

Párrafos de Vida


De Totonakas y Huayras...
Los miembros del centro tienen invariables orígenes. Aunque en él se busca revalorizar lo nuestro originario, no siempre quienes a él se suman tienen un conocimiento antelado de lo que representan nuestras culturas, aunque se comprometan y trabajen luego, y seriamente, por ellas. Los idiomas nativos, pues, no son una excepción. Del desconocimiento del quechua y del aymará, hubieron de sucederse episodios como estos.

Allá por los principios de los noventa, con motivo de celebrarse los 500 años del descubrimiento de nuestro continente, acudieron algunos de los miembros de la institución a una ceremonia realizada en el milenario Tiahuanacu, en vísperas del solsticio de invierno. De suyo inquietos y ansiosos de compenetrarse con la gente de lugar, y, por intermedio de estos, con los rituales, ceremonias y costumbres aymarás; nuestros ocasionales turistas hicieron contacto con algunos pobladores del lugar. Inquiriendo presurosos y reiterativos con una insistencia casi molesta a aquellos moradores, fueron bombardeados con una descarga de aseveraciones nativas que, por el desconocimiento del idioma, pasaron incomprendidas por los oídos de aquellos citadinos foráneos, dejándoles perplejos y anonadados.

Transcurrido aquél episodio, las risas se apoderaron del grupo por el repentino apercibimiento de su ignorancia, y como uno de aquellos no parara de hacer referencia a lo ocurrido con su continuo parloteo en términos tales como... musiconaka, fiestanaka, etc. De lo mucho que vino en sucederse intervenciones como estas, pues, el compañero Toto, que así se llamaba, en ceremonioso “aymará”, fue bautizado como totonaka. Apelativo que, todavía hoy, le es conocido y por el que le conocen...

Mas si el aymará bautizó así a un compañero, el quechua, en otros, aunque en otras circunstancias, nos mostraba igual aunque cándida y cómplice ignorancia. Así, pues, retornando de Villa Montes, de un viaje al que fuéramos acreditados en representación de la institución, el compañero B. y yo, en medio del bullanguero ambiente que era el bus en que nos encontrábamos, conversábamos con otro de los partícipes al evento, oriundo de Llallagua, aquél histórico centro minero. Amena aquella charla, sin recordar plenamente cómo, de improviso aquél interlocutor devino en darnos unas “clases” de quechua. –¿Cómo se dice cuando una roca cae rodando por el cerro al río? –inquirió P.
Sin la menor noción de cómo podía expresarse aquello en aquel idioma, al tiempo exclamamos B. y yo juntos:
–¿Cómo?
–¡Koron, koron... chulting!, manifestó sonriendo vivamente nuestro ocasional maestro lingüista, uniéndonos nosotros a aquella reacción que se tornó efusiva. De pronto P. cobró una actitud seria y procedió a lanzarnos otra interrogante:
–¿Cómo se dice radio en quechua?
Pregunta ante la que nuevamente obtuvo una respuesta negativa y respuesta ante la que ahora ya con cierto aire académico, gesticulando algo exagerado y haciendo ademanes con las manos, señalando la boca y extendiéndolas como declamativamente hacia el horizonte, exclamó, con alguna solemnidad:
–“Huayra...” –extendiendo las manos– “viento”; “simi...”, señalándose los labios, “boca”; “huayra simi,... radio”
La explicación, que nos parecía lógica, no dejaba, empero, de causarnos cierta sensación de ponderación exagerada por nuestro interlocutor, y B. con esa picardía oportuna que le es propia, entre una sincera y sarcástica actitud, le soltó a P. una interrogante:
–Si huayra simi es radio... huayra siqui será pedo?
¡... Las carcajadas brotaron incontenibles entre los presentes!

En la oportunidad de aquel mismo retorno comentamos con B. acerca de los sonidos onomatopéyicos que, en toda cultura, dieron origen al lenguaje, y no podíamos dejar de notar que la explicación que nos fuera dada por P. sobre el zambullido de su roca tenía cierta lógica, aunque no veracidad. Algo hambrientos, luego de una breve búsqueda, sacamos unos alimentos que la madre de B. nos había preparado y rememorando casi mecánicamente aquél episodio y aquél nuestro comentario, proferimos juntos al encontrar nuestra comida: “¡asta pi!”, ¡está pues!, (Aptapi)... Y degustamos presurosos.

Tres episodios en Kumuna


Las instituciones, como los hombres, tienen sus “historias”. Historias ciertamente protagonizadas por éstos, pero que han quedado plasmadas en la savia misma de las venas de aquellas y que en cierta forma las hacen, también, lo que son. Pues no son meras conjunciones de normas y sujetos las organizaciones. Y Sartañani que no es ajeno a estas consideraciones, tiene infinidad de estos pequeños párrafos de vida que son, en parte, su vida misma. ¡He aquí algunos de ellos.!


El primero...
Llegando a Kumuna después de varias horas de caminata, en la penumbra ya total de la noche, tiritando por el frío extremo y, no hace falta decir, cansados; apenas fueran apercibidos por las autoridades del lugar, invitados a pasar a la casa de estos, los “sartacos” fueron acometidos por la anfitriona a servirse chichita. “Han de estar cansados”, exclamó la Mama T’alla afablemente, “sírvanse pues estito”. En aquél recinto levemente iluminado por el destello de una vela, cansados por el trayecto y ya somnolientos, pocos de los visitantes tenían intención de servirse lo ofrecido. Mas sabedores de que no es siempre bueno rechazar un ofrecimiento, alguno de ellos empezó a servirse la chicha, exclamando tutuma en mano: “¡Jallalla tatas, mamas!”, “¡Jallalla!”, iniciando aquél episodio que hízose repetitivo y en el que, extrañados por el sabor de la bebida, no pocos la cuestionaran recibiendo la invariable respuesta: “¿Cómo pues vas a querer rechazar? Así siempre es la chichita de comunidad”.

No ha de ser que cuando ya se terminara aquél aperitivo y el grupo permaneciera expectante, ingresa la Mama T’alla recriminando a los presentes:
–Cómo pues me van a rechazar así, sírvanse pues, con cariño les estoy ofreciendo.
Actitud ante la que los visitantes quedando contrariados respondieron:
–Pero mama, ya nos hemos servido..., ya hemos secado el valde”.
–¿Cuál valde? –respondió la mama– Yo les he traído cantarito.
Acercando una vela a aquél recipiente del que nada gustosos habían estado bebiendo nuestros “sartacos”, con la tenue luz que de aquella candela se desprendía, los hospedados descubrieron que lo que habían estado ingiriendo no era precisamente la bebida de maíz incaica sino el agua en el que se había remojado el chuño para los platos del día.

El segundo...
No terminaron ahí empero los episodios aquella ocasión. Superado, aunque con mal sabor, el episodio de la chicha, cansados, como tenemos dicho, deciden los “sartacos” retirarse a descansar. Dirigidos por la Mama T’alla fueron conducidos a un ambiente en el que, presurosos, se pusieron a preparar su morada. Payasas, frazadas, slipings, fueron a parar al suelo para proceder con el ansiado descanso. Como habrá sido aquella ansiedad que nadie lo había notado hasta entonces, cuando uno de aquellos hubo de recostarse se encontró con un estrellado paisaje por techo de aquella habitación. ¡Les habían llevado a una lak’aya.!

El tercero...
Al día siguiente, algo circunspectos, los tatas fueron a hablar con las autoridades, a solicitarles puedan dotar a las mamas de una habitación con techo pues, como señalaron: –“Nosotros todavía podemos aguantar, somos varones, pero las mamas no”. Solicitud que fue acogida con diligencia y aceptada. Llegada la noche, el grupo fue dividido y mamas y tatas hubieron de pernoctar por separado. Amanecido que fue el día, con el habitual jolgorio que se da entre los muchachos en ocasiones como estas, bajaban los tatas de su lak’aya y, de súbito, una explosión de carcajadas se oyó entre ellos. Cubiertos de paja y de plumas, las mamas salían de su morada todo acongojadas. ¡Su habitación con techo había sido un gallinero!

POOPÓ - “ FIESTA DE AYLLUS “

Por Tata Leo:

Ya son muchos años q Sartañani es parte de la Fiesta de Ayllus en la provincia Poopo, este espacio representa el encuentro mayor de Sikuris en esta región, el porqué mayor? El hecho de encontrarnos rodeados de energía q transmiten las autoridades originarias en cada Ayllu en los visitacus tan peculiares y el conglomerado de gente para la interpretación del Sikuri llega a momentos a ser por lo menos de 50 personas por grupo nos llena de admiración.

Para Sartañani fue un gran reto el participar en este espacio por muchas razones, el cumplir con la vestimenta con la q nos exigen las autoridades del Ayllu, q representa un costo fuerte para nuestra comunidad, se hiso el esfuerzo de adquirir en propiedad sombreros y adornar nuestros instrumentos, otro factor la interpretación del Sikuri ya q en otras gestiones participábamos con Tablasikus, y no por el hecho de interpretar adecuadamente este instrumentos más al contrario por encontrarnos inferiores numéricamente en integrantes, como bien sabemos nuestros hermanos vienen realizando actividades personales y les es complicado asistir a muchas de nuestras actividades, por esta razón tenemos q felicitar empezando de nuestras autoridades y a todos los tatas q han dado de su tiempo para ser parte de esta “Fiesta de Ayllus” , q para muchos antiguos nos llena de nostalgias, de muchas alegrías, sabiduría y para los tatas nuevos es el verdadero comienzo como Sartañanis dentro de vivencia como comunidad.

En esta oportunidad se ha hecho el trabajo con el Ayllu Taraco a cargo del Tata Francisco Condori y la Mama Sebastiana H. de Condori, tenemos q agradecerles por la atención q nos han dado. Como anécdota existía un comentario “este año nos han dado más comida q cerveza” repetía uno de nuestros tatas, ya q nos daban el desayuno inmediatamente nos daban la laguita con su repete respectivo y a medio día el almuerzo (siempre voy a recordar las palabras del Tata Francisco q decía: al q come doble le van a dar dos carnes) y no olvidarnos de la cena. Por todo esta vivencia y trabajo q sea en buena hora este encuentro..!!!

JALLALLA AYLLU TARACO…!!!
JALLALLA POOPO…!!!
JALLALLA SARTAÑANI…!!!



ACTIVIDAD POOPO

Tatas, Mamas:

El Centro Cultural "Sartañani Wasuru Qhanampi" va participando desde varios años atrás en la Fiesta de Ayllus de Poopo, compartimos la música ancestral, fortaleciendo nuestra identidad. Acompáñanos en esta actividad.

¡¡ TAQI CHUYMAMPI SARTAÑANI¡¡


Vestimenta para actividad Poopo

Del 5-7 de agosto

- Pantalón negro
- Poncho rojo
-Sombrero negro

Para el 8 de agosto (Festival y concurso)

Varones:

- Pantalón blanco de bayeta
- Blusa blanca de bayeta
- Poncho rojo
- Faja roja
- Sombrero para sicuri (blanco)
- Medias kaytu(blanco)
-Abarca

Mujeres:

- Pollera roja
-Blusa blanca
- Abarca
- Tari roja
- Sombrero Blanco de sicuri


Nota:

Para la adquisición del sombrero y adornos cancelar 27,50 Bs., hasta el viernes 8 del presente a hrs. 09:30 a.m , comunicarse al 71859648 para confirmar.

Atte:

Mama Carmen Blanco

LUKUMPAYA PAWA UN PARAISO EN PLENO ALTIPLANO DE ORURO


El sector conocido como Lukumpaya Pawa es un auténtico paraíso en pleno altiplano orureño, por todo el paisaje, la exuberante flora y vegetación que muestra, sin envidiar a otras regiones del país. Dicho atractivo está situado a 167 kilómetros de la ciudad de Oruro, en el municipio de Huari perteneciente a la provincia Sebastián Pagador del departamento de Oruro.El recorrido a dicho lugar fue organizado por el Colegio de Profesionales en Turismo con la finalidad de que la prensa y a través de ella, la ciudadanía conozca sitios que son realmente “paradisíacos”, y que se encuentra en Oruro.La comitiva estuvo encabezada por representantes del mencionado colegio y cuatro periodistas.El viaje se inició alrededor de las 05:00 horas con destino en principio al municipio de Huari, una vez allí se hizo una parada obligada, para posteriormente seguir camino en vehículo durante 45 minutos al Sudeste hasta la comunidad del cantón Lukumpaya.La comitiva al llegar a la mencionada comunidad, buscó a las autoridades originarias del lugar o ha algún habitante del lugar, ya que según se indicó, se debe pedir permiso para ingresar al sector de Lukumpaya Pawa. Una vez obtenido el visto bueno de los personeros de la comunidad, se hizo un nuevo recorrido en vehículo durante cinco minutos al Noreste, para llegar al mencionado lugar, cuyo sitio en el inicio tiene una especie de tranca, sujetada por una cadena y asegurada con un candado, que fue abierta por un comunario que acompañó a la comitiva hasta la puerta.El lugar es una especie de cañón, el sector Sur denominado Lukumpaya y el Norte denominado Pawa divididos por un riachuelo. Para hacer el recorrido, se llevó a cabo una caminata de cuatro horas por dos senderos, uno de ida y otro de vuelta, que no fue suficiente para observar todas las maravillas del lugar.A cada lado del cañón, se divisan rocas imponentes en algunos casos de más de 50 metros y con una serie de figuras, como las existentes en Pumiri-Turco. Las formaciones rocosas naturales son de piedra arenisca, piedra flexible, son consideradas formaciones eólicas por la acción del viento, que les dio la forma. Las figuras que se vieron, está también en base a la imaginación del visitante.Lo que se observó fueron una roca en forma de sapo gigante, una pipa, un elefante, un oso, aunque para otros era la parte de un reptil, un miembro viril de varón de aproximadamente 15 metros de altura y otras figuras.Al margen de ese espectáculo, durante la caminata se vio vegetación exuberante manifestada a través de la diversidad de árboles frutales, como durazneros, manzanales, guindales y tuna, además de otros tipos de árboles como queñuales. En el sector existen un sin fin de hierbas, de los cuales se pudo identificar a unas cuantas, como la hierba buena y otros con olores fraganciosos principalmente a menta.La producción agrícola en Lukumpaya Pawa es impresionante, porque se observan a través de parcelas muy bien trabajadas por los comunarios establecidas en terrazas y pabellones, haba, papa, maíz, oca, cebolla y otros, que fueron la admiración de los periodistas. También se vio una diversidad de flores, entre ellas, rosas rosadas con una fragancia exquisita.El trato de los pocos comunarios con los que se tuvo contacto fue grato, quienes en quechua explicaron algunas características del lugar y dieron la bienvenida a los visitantes, además de recomendar que no se dañe su siembra.Después de más de dos horas de recorrido, se llegó a una especie de cavernas, donde sólo se pudo ingresar a una de ellas, por la premura del tiempo y al salir de la misma, se observó una roca de más de 50 metros en cuya punta se paraba el sol radiante que alumbraba el vergel. El retorno fue por otro sendero que llevó alrededor de dos horas, hasta el lugar de salida, donde se encontraba la movilidad de los visitantes. El lugar es propicio para hacer caminata y treking (escalar rocas).GUIASLos guías que fueron los representantes del Colegio de Turismo, Vladimir Huarachi y Daniel Coria, explicaron que una de las intenciones de mostrar el lugar, es hacer un circuito turístico incluyendo el paraíso que se visitó.“El atractivo que es natural, cumple todas las condiciones para explotarlo de manera conciente, preservando el medio ambiente practicando el ecoturismo comunitario, porque para ingresar al lugar se pidió permiso de la comunidad”, aseguró Coria.Por su parte, Huarachi explicó que el sitio responde a una época anterior a la cultura incaica y Tiahuanacu, demostrado a través de elementos arqueológicos, y el sistema agrícola que se utiliza en el sector.“Esto es Oruro y eso es lo lindo. Hay un bosque de queñuales, árboles frutales, también maíz, igual que en Tupiza. También hay fauna, liebres, cóndores, llamas, águilas y vizcachas”, señaló.


Fuente: Suplemento “KISWARA”, articulo realizado por el Colegio de Profecionales de Turismo de Oruro

C.C.A.S.W.Q. -"SONQONCHISMANTA"

Nuestro “Sereno” es parte importante de nuestra visión andina quien nos inspira para cantarle a la Pachamama, el Tata Inti, a nuestra naturaleza, al amor y a nuestra naturaleza, el amor y a nuestra vivencia en general. Nuestro entorno siempre nos está hablando, solo hay q saber escuchar y plasmarlo en el lenguaje universal de la humanidad: la música.

Este trabajo musical que lo plasmamos en el presente disco, es una muestra de la labor cultural que día a día realizamos. El compromiso que tenemos con la reafirmación de nuestra identidad andina, nos impulsa a forjarnos y distinguirnos de las manifestaciones neocolonizadoras foráneas occidentales.




Contactos:

Tata Mayor: Zamir Ortega Albino cel: 711068297
correo electronico: ccaswq@gmail.com

"EMILIO" Producciones cel:71183603
correo electronico: emi_prd@hotmail.com

SARTAÑANI - Agenda Presentación del nuevo Disco "SONQONCHISMANTA"

JUEVES 27 DEMAYO

Hrs. 20:00 Concentración en el Parque de la Unión (Ensayo general se coordinara aspectos de presentación)


VIERNES 28 DE MAYO

Hrs. 19:00 Concentración en el parque Tiwanaku (Ubicado en las calles Santa Barbará entre 6 de Agosto y Bacovick)
Hrs. 20:00 Presentación del nuevo disco en “Peña CHUSPA” (Ubicado en las calles Santa Barbará entre Brasil y Backovic)

-Vestimenta Tatas: Poncho, pantalón negro, sombrero negro, ropa de italaque y khantu e indumentaria.

-Vestimenta Mamas: Ropa de khantu, falda roja blusa blanca e indumentaria.


SÁBADO 30 DE MAYO

Hrs. 20:00 Asamblea General en el Parque de la Unión
Tema a tratar: Elección de autoridades, Promocionar nuestro nuevo álbum a nivel nacional


Tatas y mamas de nuestra comunidad, es necesario q tomen en cuenta la puntualidad. Para todos nuestros lectores quedan cordialmente invitados a estas actividades.


Mayores informes: Tata Mayor Zamir Ortega Albino cel: 711068297

FESTIVIDAD DE LA CHAKANA

(3 DE MAYO)
En el mundo andino cuando termina el mes de Abril, también terminan las lluvias, en todos los pueblos del ande, se prepara para el agradecimiento a los Apus o Wakas (Achachilas) por la generosidad con la q han ayudado a la siembra y regeneración de la vida.

Cuando se inicia el mes de Mayo los pueblos agradecen a los Apus o Wakas sagradas de su comunidad, en su montaña más alta donde colocan una Cruz, a la q tienen q peregrinar para estar más cerca del cielo de donde caen las lluvias, a esta Cruz el hombre andino la denomina “CHAKANA” donde se adornan con lo mejor de la cosecha q da la “Sallqa” (la naturaleza), se pone las mejores papas, camotes, calabazas, paltas, piñas, etc. Toda la comunidad da una plegaria de agradecimiento.

La Fiesta de la Cruz
El 3 de mayo se celebra la Fiesta de la Cruz Andina coincidente con la aparición en la vía láctea, de la constelación “Cruz del Sur” o “Chakana” en el idioma Aymará; q indica el comienzo anual de las heladas en la cultura andino-altiplánico” Chaqana Unjati Jacha Juipi Mara”. El origen de la cruz, es uno de los motivos por el cual se acepto y venero a la cruz cristiana por parte del hombre Aymará. Resultando de esta manera el mes de Mayo como la Fiesta de las cruces q se celebra en todos los pueblos del altiplano.

El Centro Cultural Autococtono Sartañani Wasuru Q’anampi(“Levantémonos con la luz del ayer”) le ha dado el significado de reconquista del espacio por medio de la ocupación de las cuatro esquinas de la plaza central de la ciudad de Oruro. En este trabajo se han sumado ya varias instituciones de trabajo cultural los que han marcado su ruta de ingreso a este lugar.

Este evento se inició por lo años 87 junto a instituciones como Jatun Jallpa, Jayamara, Winaymarka, en coordinación del Centro Cultural Autóctono Sartañani Wasuru Qanampi. Por el año 90 a falta de participación de las demás instituciones, el C.C.A.S.W.Q. se ve en la necesidad de realizar la convocatoria mediante invitaciones, y de esta manera llegando a ser coordinador para este evento.

Esta actividad fue una de las primeras, más sobresalientes y notables emprendidas por el centro, desde su fundación. Tuvo dentro la institución, en su momento, como señaláramos anteriormente, incluso más relevancia que el año nuevo originario. Hoy, se conmemora con la toma simbólica de la plaza 10 de febrero, plaza principal de nuestra ciudad. Recorriendo desde el cabildo, dibujando serpenteadas líneas por las calles de la ciudad, los julas recorren las arterias urbanas de un extremo a otro de las aceras, hasta su arribo a la plaza. Llegando a ella, de una esquina a otra, partiendo de la esquina noreste, reunidos en mullu en cada una de ellas, challando al tiempo de confraternizar, la música recorre las cuatro aristas de la plaza, al término de cuyo acto se ingresa al interior de ella, donde se realiza un pequeño acto que refiere nuestro propósito de aquellas horas: reafirmar nuestra identidad cultural y el derecho a nuestro espacio vital, en nuestra sociedad contemporánea.

Durante un pequeño espacio de tiempo pues, luego, se interpretan variados ritmos que hacen a la esencia de las naciones originarias y de la institución, para luego retornar al cabildo.

La actividad tuvo cierta notoriedad y mucha más participación, antes, que ahora. El todavía difícil contexto en el que tienen que desarrollarse actividades como estas, torna arduo el trabajo, y profundo el compromiso, de quienes se dedican a las mismas. Acaso y la declinación, casi desaparición, de varias instituciones otrora partícipes de esta actividad, no son sino expresión de ello y de que resta todavía romper con viejos esquemas y fortalecer nuestras identidades. Con todo, Sartañani se mantiene en la linea y no ha dejado de suscribir esta página que la comenzó cuando su fundación misma.

Pago a la Pachamama
La vida en comunión con la naturaleza encuentra su expresión más concreta en la relación del hombre andino, cultivan con la Pachamama y los Achachilas. Los ritos y ceremonias son medios adecuados para establecer y mantener el equilibrio armonioso entre los hombres y el mundo sobrenatural. En el mundo andino-altiplano el rito de pago a la Pachamama es generalizado.


“EL HOMBRE ANDINO ES ETERNO PORQ RECUERDA EL PASADO ANTES DE AVANZAR AL FUTURO”


¡¡¡JALLALLA 3 DE MAYO!!!
¡¡¡JALLALLA SARTAÑANI!!!
¡¡¡QAUSACHUN COCA!!!
“POR LA AFIRMACION DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS”

TATA LEO leochakana@gmail.com
(Fragmento del libro Levantémonos, inédito)

SARTAÑANI - Agenda Aniversario

SABADO 11 DE ABRIL

Hrs. 15:00 Concentración en la Plaza Castro de Padilla
Hrs. 16:00 Retreta Andina
Hrs. 19:00 Recorrido por las calles céntricas de Oruro (Hasta el local "Los Fabriles" ubicado en las calles La Paz y Rodrigues)
Hrs. 20:00 Fiesta Andina

Vestimenta Tatas: Poncho, pantalón negro, sombrero negro, sombrero de kantu e indumentaria, saco negro para las laquitas.
Vestimenta Mamas: Ropa de kantu, falda roja blusa blanca e indumentaria.

Mayores informes Tata Mayor Zamir Ortega Albino cel: 71106829.

LA FUNDACION: ROSTRO Y ESPITRITU

Las cosas no nacen de la nada. Guardan, si no son, en si mismas, el resultado de todo un proceso que las configura y les da su peculiar existencia.
En la travesía que se discurre desde la concepción al nacimiento de nuestra institución, en la que ciertamente se sucedieron acciones y hechos que, si ser indispensables, fueron necesarios para su advenimiento, se fue consolidando la esencia, la “cosa en si”, que el centro cultural significaría. Sartañani vivió ese interregno por dos años, hasta que el doce de abril de mil novecientos ochenta y cinco, en ambientes de Radio Emisoras “Bolivia”, dependiente de la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Oruro dirigida entonces por Félix Cárdenas y con la cual se había logrado un trabajo coordinado mancomunado a través de su área de extensión cultural, tras una deliberación amplia y profunda con el centro cultural Pusi Suyu de la ciudad de Cochabamba; se decidió adoptar la denominación de “Centro Cultural Autóctono Sartañani Wasuru Qanampi”: “Levantémonos con la luz de ayer”. Acaso como queriendo significar desde su denominación misma, lo que proponíase alcanzar con su creación: formalizar “una estructuración social, cultural y política para preservar, valorar y difundir en su contexto general las tradiciones ancestrales de nuestra cultura del mundo andino.”
Tornándose, desde entonces, hasta hoy, en un espacio de reafirmación y difusión de las identidades culturales originarias.

De los fundadores, como de la fundación misma, podemos decir que, la gran mayoría de ellos y aquella, han quedado casi en el olvido, y no solo porque la inexistencia de documentación, que no se cuenta entre los archivos de la institución, que refiera lo en aquellos días transcurrido –el acta de fundación por ejemplo– así lo determinen; sino porque su mismo alejamiento de la organización no permite ya rememorar suficientemente aquellas horas de su iniciativa. Lo cierto es que han quedado algunos nombres en el imaginario colectivo.

La naciente institución empieza su existencia con muchas dificultades, sobretodo porque es difícil mantener la independencia política y económica que se ha propuesto sostener en el trabajo cultural trazado, “tratando de demostrar que en la ciudad también podía hacerse trabajo cultural de las comunidades”. Bajo, todavía, el auspicio de la F.S.U.T.C.O., las reuniones se realizan en el lugar de su fundación, radio Bolivia. Sartañani se organiza de forma que “cuenta con varios Ayllus, entre ellos: el Ayllu de Músicos (que trabajan a nivel de taller),
el Ayllu o Comunidad de Baile, que por ser el más numeroso está dividido en dos mitades de paridad suplementaria y correspondencia que son los de “Aransaya” (lado derecho; arriba y llevan el color verde), y los “Urinsayas” (lado izquierdo; abajo; color rojo); finalmente están los Ayllus (y talleres) de: 1) Investigación Etnohistorica; 2) Etomusicología; 3) Etnolingüística; 4) Documentación de Expresión Gráfica y Visual (iconografía: fotografías, dibujos, slachs, videos, etc.) y 5) Comunicación Social.”

Las primeras mesas se realizan, entre 1986 y 1987, con la participación de integrantes de “Wali Q’asa”, en la casa del c. Jorge Sahonero. Por esta época, también, se realiza un ritual Kallawaya con un compañero, Víctor, del que lamentablemente solo nos ha quedado el nombre, bajo cuya iniciativa se habrían, poco después, asumido las primeras nociones de cambiar la danza de la tarqueada por la del Khantu.


¡JALLALLA SARTAÑANI!
¡JALLALLA TATA INTI!
¡JALLALLA MAMA QUILLA!
¡KAUSACHUN COCA!


(Fragmento del libro Levantémonos, inédito)

De leve a grave

Advertimos ya, en oportunidad previa, sobre el sesgado discernimiento que algunos miembros de la A.C.F.O. vierten sobre el Carnaval de Oruro, criterios que menoscaban su configuración como la particular manifestación cultural que es y, lo peor, que ahora están siendo plasmados, profundizándose más, en normas institucionales que contradicen el objetivo corporativo de la misma A.C.F.O. y del Carnaval.

Se tiene por establecido, que las vertientes culturales históricas de nuestro Carnaval, son tanto las provenientes de las naciones originarias cuanto la de las europeas. Es la particular complexión, producto de la amalgama histórica de estas culturas, la que le ha dado su actual carácter de patrimonio de la humanidad y es ese hecho el que ha sido reconocido por la UNESCO con el título que ostenta hoy. De ahí que cuando se postulara al Carnaval de Oruro para el reconocimiento del que es objeto, no se dudara en afirmar de él que: “es un proceso cultural que se caracteriza por un alto grado de interculturalidad e intangibilidad que rebasa los 2000 años, se realiza en un espacio cultural que obedece a procesos de acumulación y selección de manifestaciones culturales” que se particulariza por “la ritualidad, la creatividad, la perfectibilidad y la continuidad” y se constituye en “una expresión cultural, popular y tradicional de valor excepcional desde el punto de vista filosófico, histórico, económico, antropológico, lingüístico, etnológico, sociológico, artístico y literario” con “un profundo arraigo en una sociedad de tradición cultural de las comunidades descendientes de las antiguas civilizaciones prehistóricas de los Andes” y que “permite afirmar la identidad cultural de la diversidad de pueblos participantes y constituye un medio privilegiado de acercamiento entre estos pueblos y comunidades deseosos de compartir el acervo de sus antepasados, con respeto por su diferencia y el reconocimiento a las otras manifestaciones espirituales.” (Formulario de Candidatura a la UNESCO)

El carnaval de Oruro, nos dice su justificación oficial, es un espacio “intercultural”, donde confluyen varias culturas, fundamentalmente aquellas devenidas de “las antiguas civilizaciones prehistóricas de los Andes”, que pretende afianzar la identidad de estos pueblos y comunidades, “compartiendo –con respeto– el acervo de sus antepasados”, incluidas sus “manifestaciones espirituales”. Respeto a la ritualidad-espiritualidad de estas manifestaciones culturales para lograr una “interculturalidad”, vale decir, haberse constituido en un espacio que permita hacer posible, en un marco valorativo respetuoso de los caracteres de estas culturas, la vinculación cultural, por tanto, no ya aculturizando, es decir, imponiendo, sino coexistiendo; es la esencia que cardinalmente denota el carnaval de Oruro para haberse acrecido con el título de Patrimonio de la Humanidad. No otra cosa demuestra que, en su seno, se acoja a ”18 especialidades de danza, que provienen de igual número de manifestaciones culturales”; es decir, de 18 contextos diferentes, los más de ellos, ajenos a la geografía orureña.

En este sentido, lo que preocupa es que, con mayor énfasis que en pasados años, se deseche esta característica vital del Carnaval de Oruro y que en su Reglamento 2009 se haya incluido preceptos tales como que los danzarines cuenten una “actitud de advocación mariana”, que los conjuntos realicen su peregrinación precedidos “obligatoriamente por la imagen de la Virgen del Socavón” y que el carnaval sea definido como una festividad, exclusiva, en honor a ella; cuando; lo primero, dado el carácter subjetivo de la pretensión no es susceptible de imponerse, lo segundo; no condice con el respeto por las manifestaciones espirituales que se supone cuenta el carnaval vulnerando el elemental derecho a la libertad de conciencia y de fe de muchos participes del Carnaval y, lo tercero; es una pretendida, por pretendida no menos falaz, imposición histórica y antropológica.

Pero la “advocación” de nuestros directivos llega más allá todavía, en el Reglamento de esta gestión se dieron a elaborar toda una sección para normar Las Veladas de los conjuntos, en las que reconocen (!) un “espacio para la ritualidad ancestral” y hasta una “religión (?) andina” para, acto seguido, soslayar su mentado “respeto a las identidades culturales diferentes” obligando, so pena de Sanción Grave (antes leve), que obligatoriamente, incluso aquellos que no profesan la fe católica y tal vez si lo que nuestros “teóricos” de la A.C.F.O. denominan “religión andina”; deban realizar un “peregrinaje”, “precedidos”, “obligatoriamente”, por la imagen de la Virgen del Socavón, con advocación mariana.

Las consideraciones señaladas desechan el criterio de quienes se enjuagan la boca con zalamerías marianas y se dan ínfulas de normadores, aunque ello no les impida reparar en practicas contrarias a la fe que dicen profesan; empero, el criterio que nos ha animado a escribir este corto artículo dista mucho de sólo referirnos a dobleces, nos importa si, por el contrario, el daño a la integridad teórica que ha logrado el Carnaval y que no puede expresarse si no en el daño a quienes participan de él pero distan de tener los criterios estrechos de “los teóricos” de la A.C.F.O., que pretenden darle al Carnaval un exclusivista carácter mariano, pero que no dudan en realizar k’oas, entregar mesas y, con seguridad, ch’allar (será sólo por chup...?). Como pretendidos organizadores absolutos del carnaval debieran analizar esto, antes que sólo “normar” para salvaguardar intereses particulares e inamovibles, de si mismos y sus allegados, en la A.C.F.O. y en sus mismos conjuntos, donde yacen años y años, eternizados como dirigentes insustituibles, cometiendo “herejías” de esta índole.








Abg. Arnold John Campos Atanacio
EX PDTE. CONJUNTO KHANTUS SARTAÑANI

REVISTA LEVANTEMONOS

EL CONSEJO DE ORGANIZACIONES CULTURALES ANDINAS

La actividad cultural del Centro tuvo interesantes iniciativas y resultados a este tiempo de su existencia. Sartañani fue, de los centros culturales existentes, casi siempre, el nervio motor de toda actividad ilustrativa en nuestro medio. Así sucedió con las primeras exteriorizaciones de la fiesta de la cruz, del año nuevo andino y de la jornada reivindicativa del 12 de octubre, y así sucedió también con la proposición de forjar una unidad entre los centros culturales autóctonos de la ciudad, para defender y mejorar el trabajo cultural en nuestro medio.

No es de extrañar, en consecuencia, que por asamblea de 25 de marzo del 2000, Sartañani decidiera brindar su pleno respaldo y su decidido impulso –tras una organización preliminar que hubo de iniciarse allá por los años 98-99– a la creación de un Consejo Interinstitucional de Centros Culturales y Conjuntos Autóctonos, el CICCA.

El acontecimiento que tuvo ciertamente su importancia, porque los delegados a realizarla fueron los que, finalmente, la hicieron realidad, marcó el inicio de una etapa en la que aquella iniciativa se hubo de forjar seriamente por necesaria. Fue esta decisión la que motivó aquél desafío y la que le brindó solidez en su inicio.

Así, poco más de un año después de aquella decisión institucional, el 21 de mayo del 2001, en la sede de la “Comunidad Puna Illawara”, y con la participación de: Círculo Cultural Jacha Cocanis, Centro Cultural Tarkus, Centro Cultural Autóctono Sartañani Wasuru Qanampi, Centro Cultural Autóctono Sumaj Punchay, Centro Cultural de Investigación Inti Pacha, Taller Cultural de Arquitectura Andina Ñampi, Centro de Investigación Cultural Hata(después Pecas)-Oruro, Centro Cultural Chacas, Casa Arte Taller Cardozo Velásquez; se realizó la primera reunión formal para conformar una entidad matriz de los centros y conjuntos culturales autóctonos de nuestra ciudad. En ella, se fijaron los antecedentes previos a la misma, que invariablemente señalan a Sartañani y a instituciones como los “Tarkus” y “Jatun Jallpa”; y se establecieron las bases para consolidar el propósito manifiesto de los presentes en próximas reuniones. Las que hubieron de desarrollarse, por entonces, a razón de una por semana.

Las discusiones se centraron en la definición ideológica –orgánica, política y económica– que debía ser adoptada por la organización. Ateniéndose, finalmente, al criterio de –ante las posibles discrepancias que pudiera ocasionar esta modalidad, por instituciones no compartientes con los principios ideológicos propuestos– elaborar un Plan de Trabajo consensuado por objetivos. De forma tal que el criterio a seguir fuese inclusivo y no excluyente, y tomando como criterio base de los planteamientos la revalorización, conservación y difusión de los valores culturales autóctonos. (Según la propuesta de Puna Illawara Andino-Amazónicos)

Aquél año pues, tras una discusión que se iniciara el 4 de junio, la discusión sobre la constitución, bases y documentos del Consejo pretendido, hubo de alcanzar resultados ya prometedores, cuando en reunión de 11 de junio en la sede de los “Tarkus”, se procedió a establecer algunos acuerdos consensuados que delineaban ya, con cierta precisión, la futura personalidad de la organización. Entre ellos:

– Se establece la estructura de la Organización en relación a la experiencia histórica y la entidad del ayllu, por tanto la elección de las AUTORIDADES será rotatoria, adoptándose el cargo de JILAKATA.
– El Consejo de JILAKATAS tomará determinaciones y decisiones. Las principales Autoridades (TATA MAYORES) serán las que ejecuten decisiones y acuerdos.
– La representación máxima recae en tres tatas mayores a ser:
1. TATA MAYOR - PRESIDENTE
2. TATA MAYOR - HACIENDA AUXILIAR
3. TATA MAYOR - ACTAS AUXILIAR
– Se aprueba el denominativo de TATA MAYOR a la Super Estructura orgánica direccional.
– La representación de los delegados será institucional.
– La revocabilidad será al representante y no a la Institución.
– Las ex-autoridades conformarán el consejo de amautas como tribunal de honor, para precautelar los objetivos de la Institución.
– El consejo toma decisiones y los miembros ejecutivos cumplen la determinación.
– Las instituciones designan a un representante como delegado titular, siendo los mismos en vigencia.

El 18 de junio, en la finalidad de concretizar la organización del Consejo Interinstitucional ya delineado, de acuerdo a las directrices y estructura definidos por la reunión precedente, se procedió a votar el nombre y conformación de la suprainstitución cultural andina, definiéndosela, por amplia mayoría, con el nombre de Consejo de Organizaciones Culturales Andinas, COCA. Sartañani fue igualmente elegido como primera Autoridad Mayor de la institución, así como Tacua Ñampi e Inti Pacha, como autoridades de finanzas y de actas de ella, respectivamente. Determinándose, además, que la posesión de las autoridades de la naciente organización tenga que realizarse en el Inka Kori Kancha, en la fecha de la celebración del año nuevo andino.

De la escasa documentación existente, se colige que terminado este proceso, la nea institución entró en un período de agobiante apatía. No obstante de los esfuerzos por hacerla activa de variadas actividades y, fundamentalmente, de la concreción de sus estatutos y reglamentos propios, indispensables para su plena constitución.

Recién para el 18 de enero del 2002, se observa a la organización definiendo su participación en la “Feria Exposición Cultural, Tradicional y Popular” organizada por la Federación Universitaria Local, para febrero 6 de ese año. Esta actividad, de la que ciertamente se participó con gran resultado, mostró las proyecciones que podían realizarse a partir de la organización naciente, mas, también, hubo de descubrir encubiertos propósitos de algunos miembros que pretendían valerse de ella. Lo que con el tiempo, además de algunas honestas discrepancias entre las orientaciones institucionales miembros, llevó a su nunca formal entierro.

Esta iniciativa, que contuvo, por lo menos en su etapa primera, un honesto compromiso y una acertada razón para su consolidación, en defensa de las culturas originarias andinas, bien vale la pena pueda reencausársela, y acaso como la vez primera, la iniciativa corresponda a Sartañani. (*)

Ésta página histórica, de los centros culturales de la ciudad no sólo de Sartañani, se ha mostrado tan necesaria como incumplida. Una vez más ha quedado demostrado que la unidad es elemento indispensable para forjar tareas trascendentales. De ahí que, una vez más, Sartañani haya emprendido la tarea de proseguir con aquella labor iniciada y de que se haya sostenido una reunión la semana pasada y se esté procurando otras, con los centros culturales de la ciudad, en las que se permita forjar esta ansiada meta. Valga la oportunidad a quienes nos leen para invitarles a ser partes de este objetivo justificado, por necesario.

(*) Del Libro inédito “Levantémonos”

COMUNICADO A NUESTROS LECTORES

El presente blog nació a luz por iniciativa de algunos de nuestros compañeros. Como manifestación y expresión de su impetuoso y núbil espíritu, como demostración de que es posible adecuar la tecnología, los medios que ella nos posibilita, a nuestras finalidades, sin perder nuestra esencia. Entiéndase entonces, que el trabajo realizado hasta hoy ha sido el trabajo de nuestros compañeros, a ellos se debe que este tiempo hayamos contado con este espacio que nos ha permitido llegar a Ustedes.

No obstante, de conformidad a la estructura que cuenta nuestra institución, y con el objetivo de fortalecer la investigación en ella, últimamente se ha decidido conformar la comunidad de investigación; que será la encargada de llevar a cabo esta tarea, con las investigaciones en general, con la revista trimestral que editamos, con el programa televisivo que tenemos, y con este blog. De ahí que, desde ahora, la responsabilidad por lo que en esta página se edite, sea un poco mas institucional.

Al tiempo de agradecer a quienes fueron los artífices iníciales de esta labor: tatas Sandro Choque, Christian León y Juan José Mamani, les invitamos a no perder contacto con nosotros y a, como hasta ahora, imbuirnos de ánimos con sus sugerencias y vuestros comentarios.

Las Autoridades y la Comunidad de Investigación
Centro Cultural Autóctono Sartañani Wasuru Qhanam
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